04/09/2017
Texto: SAS
Fotos: © LucasArts Entertainment Company / Lucasfilm Ltd. / Paramount Pictures / Dark Horse Comics / Melissa A. Thomas / Cannes Festival / Amblin Entertainment
«Fate of Atlantis se convirtió en un clásico de las aventuras gráficas, la cual se especuló, por aquella época, ser la cuarta parte de la saga de Indiana Jones…»
El primer «Indy IV»
En 1992, la empresa de videojuegos LucasArts, anteriormente LucasFilm Games (empresa del todopoderoso George Lucas, del que hemos hablado ya largo y tendido en este WordPress), desarrolló un videojuego del añorado género de las aventuras gráficas. Esta no fue otra de la que se especuló durante aquella época ser la cuarta parte de la saga del arqueólogo más famoso de la historia del cine: Indiana Jones.
Aquel videojuego fue, sin duda alguna, Indiana Jones and the Fate of Atlantis, una impresionante aventura escrita y dirigida por Hal Barwood, guionista colaborador en varios filmes dirigidos por Steven Spielberg como Loca evasión (The Sugarland Express, 1974) y Encuentros en la tercera fase (Close Encounters of the Third Kind, 1977), que se convirtió en el videojuego del año y pasó a la historia como un clásico dentro del género de las aventuras gráficas. Pero, la historia real de «Indy IV» aún estaba por escribirse…
«El cómic de Fate of Atlantis se escribió en 1991; sin embargo, hasta 2008 no volvimos a ver a Harrison Ford enfudado como Indiana Jones en la gran pantalla…»
La adaptación en viñetas de Fate of Atlantis se hizo incluso un año antes que el videojuego, en 1991, de la mano creativa de Dan Barry, entre otros. El lápiz de Barry asentó el diseño inicial del mítico continente perdido de la Atlántida, así como presentó a los personajes principales de la historia como a la histriónica médium, Sophia Hapgood y al malvado oficial del Tercer Reich, Klaus Kerner.

El segundo «Indy IV»
Aunque para ver la cuarta parte oficial de Indy tuvieron que pasar dieciséis años más: hasta 2008 no volvimos a ver a Harrison Ford (versión no-pixelada) enfundado en su chaqueta de piel, sombrero fedora y látigo de domador de fieras en la gran pantalla. De hecho, los esfuerzos para llevarlo de nuevo al cine comenzaron mucho antes. Fue precisamente en 1992, en plena fiebre de Fate of Atlantis, cuando muchos hubiésemos querido ver en la pantalla la adaptación al cine de la gran aventura de la Atlántida. Sin embargo, George Lucas estaba en pleno trabajo de concepción de un nuevo guión para el intrépido aventurero que, de hecho, le costó bastante tiempo de llevar a la gran pantalla.

El guión oficial de «Indy IV» nació en plena producción de la teleserie producida por George Lucas, Las aventuras del joven Indiana Jones (The Young Indiana Jones Chronicles, 1992). En uno de los episodios cancelados, Lucas pareció encontrar la inspiración perfecta para lo que él mismo calificó como «un argumento igual de fascinante que el del Arca Perdida…» Tal argumento hacía referencia ya al famoso cráneo de cristal y a unas criaturas extraterrestres: se tituló provisionalmente Indiana Jones and the Saucermen from Mars y fue escrito por Jeb Stuart. Pero este guión no pareció satisfacer ni a Harrison Ford ni a Steven Spielberg. Este último le dijo que no le apetecía volver a dirigir una cinta sobre extraterrestres después de haber dirigido tres a lo largo de su filmografía. Entonces Lucas, frustrado, comenzó con la preproducción de las precuelas de Star Wars, es decir, con los Episodios I, II y III, metiendo en el cajón el guión de «Indy IV» indefinidamente.
«En uno de los episodios cancelados de la teleserie sobre Las aventuras del joven Indiana Jones, Lucas pareció encontrar la inspiración perfecta para lo que él mismo calificó como «un argumento igual de fascinante que el del Arca Perdida…»»

Hasta que no llegó el nuevo milenio, en 2000, el proyecto de «Indy IV» no resucitó. M. Night Shyamalan pretendió hacer una secuela del Arca Pedida, cosa que Lucas y Spielberg no le permitieron. Entonces, Lucas contrató a 3 guionistas diferentes, entre ellos a Frank Darabont, director de La Milla Verde (The Green Mile, 1999) para que cada uno hiciera su particular aproximación al guión de «Indy IV». Spielberg le declaró a Lucas que el guión de Darabont era el mejor pero Lucas lo rechazó porque iba en contra del planteamiento del personaje. Nuevamente, el guión de «Indy IV» quedó suspendido hasta 2005, fecha en la que Jeff Nathanson lo abordó de nuevo bajo el prisma de Lucas y que, finalmente, firmaría David Koepp en 2006, presionado por Harrison Ford a acabar de escribirlo ese mismo año ante la amenaza de renuncia del actor al proyecto de «Indy IV». Koepp lo escribió en el tiempo previsto titulándolo Indiana Jones y el destructor de mundos, título que fue reemplazado por Spielberg por el actual Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal. El periplo de «Indy IV» había llegado finalmente a su fin.
Aciertos y errores de los dos «Indys IV»
«El mayor acierto de Fate of Atlantis fue su final épico en la hundida Atlántida, por contra, el mayor desastre del reino de la calavera de cristal sea quizás la secuencia de la nevera en la que Indy elude una bomba nuclear…»
Las dos versiones de «Indy IV», tanto el videojuego de 1992 como el filme de 2008, no estuvieron exentas de aciertos ni de errores. El videojuego escrito y dirigido por Hal Barwood fue increíble para la época pero, por un lado, era demasiado megalómano en su forma narrativa. Habían 3 maneras diferentes de llegar al final: el modo equipo, el modo acción y el modo ingenio, según cómo queríamos que se desarrollara la aventura (recuerdo pasarme horas y horas intentándome pasar el juego en los tres modos sin écharle mano al libro de pistas… ¡era prácticamente imposible!) Pese a su dificultad, la historia era sencillamente una maravilla: ¡parecía realmente una película de la saga de Indiana Jones! Volvía a aparecer el entrañable cuidador del museo, Marcus Brody, tenía un villano temible como lo fue el comandante nazi Klaus Kerner y nuestra particular partner femenina, la médium Sophia Hapgood, conocida del pasado de Indy, le daba un contrapunto perfecto al argumento. El final del juego, donde se desarrollaba en la hundida Atlántida, fue lo mejor de la historia, algo realmente épico.

«El guión de Koepp resulta lo suficientemente coherente con la época histórica que Lucas intentó captar para la película: los años 50 en Norteamérica fueron los años de la Guerra Fría por excelencia, y las historias de aliens y de OVNIS se pusieron totalmente en voga.»
Si pasamos a analizar la cuarta parte oficial de Indiana Jones, la del reino de la calavera de cristal, pese a ser una de las más criticadas de la saga, no está tan mal como al principio se dijo. El guión de Koepp resulta lo suficientemente coherente con la época histórica que Lucas intentó captar para la película: los años 50 en Norteamérica fueron los años de la Guerra Fría por excelencia, donde todo el mundo sospechaba de «todo el mundo», valga la redundacia. El terror a que los rusos atacaran con armamento nuclear estaba a la orden del día, y las historias de aliens y de OVNIS se pusieron totalmente en voga. El mayor desastre que alberga la película sea quizás la parte de la nevera en la que Indy se oculta para eludir una bomba nuclear y esta sale disparada volando hacia el cielo. Tras ello, Indy, a su avanzada edad, sale vivito y coleando del refrigerador. Aunque hay cosas que ni tan siquiera Indiana Jones podría llegar a superar, por mucho que Spielberg, Lucas y Koepp nos quieran convencer de ello…
¿Quieres saber más sobre el fantástico universo de Indiana Jones? Nuestro WordPress hermano Friki Non Plus Ultra, ha preparado una entrada especial sobre este héroe simpar. Te animamos a leerla haciendo clic aquí mismo: “«Conseguidor» de antigüedades raras”: un breve repaso a los 9 McGuffins más frikis de la saga de Indiana Jones.
Un comentario en “25 años de «Indy IV». No, perdón: 9 años… No, 25… No, 9… ¿«Fate of Atlantis» o «La calavera de cristal»?”